La final del pueblo
- outpapergye
- 7 mar 2023
- 4 Min. de lectura
Actualizado: 14 mar 2023
Pueblo contra pueblo. Ídolo versus Ídolo. Camisetas amarillas frente a camisetas amarillas. Si la LigaPro requería de una final distinta, propia de un documental, esta se presenta como la ideal.

Barcelona y Aucas siguen representando al pueblo y mantienen ese espíritu amateur con el que nacieron hace 97 y 77 años, respectivamente. Se asemejan, aunque el palmarés los distancie. El primero se ilusiona con su estrella número 17 para alejarse como máximo ganador del torneo nacional de fútbol y el otro sueña con su primera corona.
Los auquistas piensan en tocar la gloria frente al equipo de la mitad más uno; los barcelonistas en conquistar otro estadio quiteño.
Este domingo, a las 16.00, se jugará la primera parte de la final que rompió el molde, la inesperada, la inédita. “A lo mejor no era lo que muchos querían, pero es indiscutible que tendrá un gran valor por el calor y el amor que siente una gran cantidad de hinchas hacia estos equipos”. El analista deportivo Diego Arcos comenta que esta contienda era justa y necesaria para recuperar las esencias del fútbol.
El color amarillo que identifica a ambas escuadras es solo una casualidad, agrega, aunque es un detalle agradable. “Que Barcelona y Aucas disputen el título después de tantos años de fútbol hace justicia a la lealtad y al amor sincero de muchos y buenos seguidores, que disfrutarán de una final que debía darse”.
Ricardo ‘Bocha’ Armendáriz coincide con los conceptos y aporta un ingrediente especial, exclusivo de quienes tuvieron el honor de haber defendido las camisetas de ambos clubes. “Aucas es un equipo que tiene una hinchada cautiva, que nunca abandona. Es una afición leal, fiel, que apoyaba constantemente. Mientras jugar en Barcelona es sacarse el Óscar. Todo el mundo está pendiente de lo que haga. Tiene un público exigente: si el equipo no anda bien, lo reprueba; pero si brilla el hincha le entrega el corazón. Es maravilloso representar a este equipo”.
Existe una percepción general de que Aucas llega a la definición por la corona con un gran apoyo nacional. Y el ‘Bocha’ aprueba. “Si queda campeón, nadie le pondrá mala cara; es un equipo que no tiene resistencia. También es ídolo del pueblo. Será una excelente final; el ídolo grande contra el ídolo pequeño. El ídolo del país contra el ídolo de un sector de Quito”.
Las celebraciones de Aucas en las 6 últimas décadas se han generado por hacer respetar su cancha, ganarle a uno de los grandes -especialmente a Liga, debido a la rivalidad-, ascender a la serie B o a la serie A. “Es un club muy particular, distinto al resto, un equipo con una hinchada sufrida, porque nunca ha sido campeón, pero con mucha mística”, expresa el periodista y poeta Fabián Darío Mosquera.
“Está vinculado con un sector popular de Quito y por su plantel han pasado personalidades heterodoxas. Cómo no ser hincha de un equipo donde jugaron dos locos famosos: René Higuita y Sebastián Abreu. Es muy raro que dos dementes y románticos del fútbol latinoamericano como ellos, al borde de lo artístico, hayan vestido la amarilla del Aucas”.
Por ambos finalistas también pasaron estrellas como Marco Antonio el ‘Diablo’ Etcheverry, aunque al ‘Papá’ llegó como entrenador, y Jaime Iván Kaviedes. “El ‘Nine’ dejó una marca profunda en Aucas. Con su llegada se generó el discurso del hijo pródigo, del muchacho desencontrado y bohemio que se reencuentra con el fútbol en un espacio místico y de pueblo”.
Esa es la retórica que sostiene al Aucas y que se valora ahora más que nunca -argumenta Mosquera-, porque cree que el fútbol se ha vuelto un agregado de relaciones económicas. “En la actualidad los que tienen dinero compran un equipo de fútbol y la gente debe repetir que el club ya es grande, porque de repente contrata a Neymar en 300 millones de dólares. Ese fútbol ha reducido la identidad del juego a una serie de transacciones y hace olvidar que los clubes son espacios de sociabilidad y afecto, porque así surgen en términos barriales, comunitarios… Y eso es el Aucas, una connotación comunitaria”.
Que se encuentren estos equipos para disputar la corona le da un matiz peculiar a la joven LigaPro. “Barcelona es un fenómeno que no se repite en ninguna parte del mundo. Que la mitad de un país y un poco más sea hincha de un equipo no existe ni con Flamengo ni con Boca Juniors. Es un fenómeno sociológico muy particular. Guardando las distancias, en términos de proporciones y escala de cada club, sí hay una resonancia afectiva y cultural entre un equipo y otro, entre Aucas y Barcelona. Será una final cautivadora”, describe Mosquera.
El conjunto quiteño tiene una cita con la historia. La gran oportunidad para retomar los éxitos de sus primeros años. “Consiguió un pentacampeonato entre 1945 y 1949 en la era amateur y fue campeón profesional de Pichincha en 1959 y 1962. Después de 60 años tendrá la posibilidad de conseguir otro título, aunque esta vez a nivel nacional”, cuenta Antonio Ubilla, comentarista y estadígrafo de fútbol.
Barcelona, en cambio, apunta a plantar bandera por cuarta ocasión en un estadio quiteño, apunta Ubilla. “Dio vueltas olímpicas en El Ejido, el Olímpico Atahualpa y el Rodrigo Paz. Sin duda alguna será una final apasionante por el contexto y la historia, distinta, de cada uno. El uno cuenta con un gran palmarés, incluso es superior en enfrentamientos directos, mientras el otro llega en mejores condiciones futbolísticas”.
El escritor uruguayo Eduardo Galeano (+), apasionado por el fútbol como casi todos los uruguayos, amante del espíritu amateur y las tradiciones populares se habría puesto de pie, incluso frente a un frío televisor, para aplaudir a los rivales de esta semana antes de mover la pelota. Insistía en que el juego debía volver a sus raíces, alejarse de la industria y recuperar la esencia barrial. “El club es la única cédula de identidad en la que el hincha cree. Y en muchos casos, la camiseta, el himno y la bandera encarnan tradiciones entrañables, que se expresan en las canchas de fútbol, pero vienen de lo hondo de la historia de una comunidad”. Es el momento del pueblo.
Primera final - domingo 6 de noviembre a las 16:00
Autor: Elías Vinueza Rojas
Comments